Comunión Piano Cake

Tarta 1º Comunión, o la tarta misión imposible...

Esta tarta fue un detalle que decidió hacerle una madre a su hija en su primera comunión. Y me pidió incorporar un piano, ya que le encanta tocarlo y disfruta mucho las clases con su maestra de música. 

Pero lo que sí supuso un auténtico reto fue el piano, ya que no había hecho ninguno antes. A continuación os pongo algunas de las fotos del laaaargo proceso de fabricación y montaje. Si hubiera sido un "piano ikea" la cosa hubiera cambiado... jaja

Intenté hacerlo lo más exacto posible, pero un piano tiene millones de detalles y había que simplificar. Lo que se ve de fondo es mi mantelito de cupcakes donde trabajo el fondant y mis cositas :) Es super bueno porque repele el fondant y no se pega :) , en cambio, otras superficies tengo que enharinadlas.

Para que no le faltara detalle, hice un librito de partituras, que si os fijáis en el tamaño de mis dedos, podéis imaginar el pulso que hay que tener, y el tiempo a dedicarle.

Pieza a pieza finalmente dan forma al gran piano!

El problema y la pena, es que pensaba que al incorporarle el CMC aguantaría toda la estructura. Al hacer tan fina la base del piano, no soportó el peso, y cuando coloqué las patas el piano se venia abajo :( Estuve a punto de que dos días de trabajo se fueran a pique. Así que, tuve que tomar la decisión de ponerlo sin patas. Tengo que perfeccionar mi técnica en estructuras, empezaré mi carrera como arquitecta :) Aún sin ellas, el piano no perdió su esencia.

Y ahora hablemos de la señorita de la comunión. Lucía llevaba un vestido de comunión color crema con mangas francesas. Tiene un pelo precioso castaño clarito que intenté plasmar. Al vestido le acompaña una bonita diadema y un rosario. Sin olvidar el lazo de la parte trasera.

El día que me puse a hacer la tarta, mi horno decidió ponerse gracioso y jugármela un ratito. Hice un primer bizcocho, y teniendo las mismas proporciones, la misma temperatura, la misma distancia en la rejilla que siempre.... se me quemaba por arriba y se me quedaba crudo por dentro! 

Esto supuso.... una hora de horno cambiando el bizcocho de altura en la bandeja, terminando crudo y sin subir, y haciendo un segundo que casi fue por el mismo camino pero conseguí salvar.... Eso sin contar que abrir el bizcocho para rellenarlo, montarlo y cubrirlo fue otra misión imposible... 

Menos mal que las cosas las hago con tiempo... 

Pero no pasa nada! de los errores y de las circunstancias a contracorriente se aprende! Uno para saber defenderte y otro para ponerle remedio a tiempo.

Y nada más! Que bastante es con este post taaan largo!

Espero no haberos aburrido!

Besitos lacasitos!